Un modelo basado en las personas es un proyecto común. Un proyecto común es un equipo que trabaja en la consecución de un objetivo único. Todo el grupo conoce ese objetivo, porque hay transparencia y confianza, y todas sus acciones están encaminadas hacia el mismo destino. La colaboración entre las personas es alta, independientemente de los niveles que existan en la organización.
En un proyecto común existen ciertos lideres que traccionan e infundan ánimo a los demás.
En un proyecto común se considera a las personas. Se les escucha y se valoran sus aportaciones. Se reconoce su trabajo y su contribución al proyecto.
Todas las personas tienen suficiente información como para valorar la marcha del proyecto. Deben conocer para qué clientes trabajan, dónde van montadas las piezas que ellos producen, los materiales que se procesan, los problemas de calidad, el resultado del negocio, qué visitas se realizan o nos realizan, pero sobre todo el porqué de las cosas.
Las personas deben acudir al trabajo con ilusión, con ganas de contribuir en la creación de algo de forma conjunta. Cada persona debe asumir la responsabilidad de su tarea y realizarla sin la necesidad de que exista supervisión ni un control posterior. Por convencimiento propio de aportación a un conjunto con el que se siente identificado.
En un proyecto común buscamos el bien del conjunto, no solo el individual. A todos nos interesa que la empresa vaya bien:
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