Dejar para mañana lo que puedas hacer hoy. ¿O era al revés?
Todos hemos conocido gente vaga a la que hemos tenido que hacer trabajar. Es esa gente que se distrae voluntariamente con cualquier cosa, procura pasar desapercibida haciendo el mínimo posible y se escaquea ante cualquier tarea adicional. Aquellos a los que les gusta la contemplación en horario laboral. El vago, lo es por naturaleza. El que no quiere trabajar, hará lo posible por no hacerlo. Si eres su jefe, te tocará hacer que trabaje, y va a ser duro. Pero, lo tienes que hacer por respeto al resto de personas que trabajan en la organización. Tampoco nos podemos permitir el contagio si queremos que la empresa sobreviva en el mercado.
Adicionalmente, te encontrarás que a los vagos es difícil despedirlos. En ocasiones porque llevan 30 años en la empresa, en otras, porque son delegados sindicales en esta. Lamentablemente, tanto para la empresa como para el propio sindicato, los que se suelen apuntar son los que menos ganas tienen de trabajar(como en todo, hay excepciones)
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