SOBRE LA CONCILIACIÓN Y OTRAS MENTIRAS

4 diciembre, 2018. 0 Comentarios
SOBRE LA CONCILIACIÓN Y OTRAS MENTIRAS

SOBRE LA CONCILIACIÓN Y OTRAS MENTIRAS

4 diciembre, 2018 / 0 Comentarios

Por mucho que queramos vender que somos una cosa somos otra. Existe una historia machista enraizada en nuestra cultura que de alguna forma hoy pervive. Por un lado, estamos con el Me too y la paridad, y por otro, nos bombardean con Reggaeton machista.

Cuando una pareja tiene un hijo, en la mayoría de las veces (por no decir todas) es la mujer la que sacrifica su carrera profesional por el cuidado de los hijos. No porque ella comparta una visión machista sino porque la propia sociedad es la que muestra su cara machista, es decir, que desgraciadamente muchas veces su condición de mujer ya supone un hándicap de antemano que se ve reflejado en su proyección profesional. Todo lo demás, es mentira. Acudo a muchos foros y charlas para directivos, y el número de mujeres lo cuento con una mano. No conozco a ningún hombre que haya solicitado reducción de jornada por paternidad, y créeme, conozco a mucha gente.  Sin ir más lejos, en nuestra empresa estamos 80 personas, y tenemos a 5 mujeres con reducción de jornada, pero ni un sólo hombre. La estadística está para algo.

La igualdad no se consigue sólo dando 4 meses de “vacaciones” a los hombres cuando se tiene un niño. Se consigue cambiando una cultura y una mentalidad, y hay que empezar desde abajo, en casa y en el colegio, cuando los niños son pequeñitos y a traves del ejemplo. Tenemos que educar a los niños en la responsabilidad compartida de aspectos y tareas. Los valores se inculcan desde el minuto uno y durante toda la vida de niño. Posiblemente, más de una mujer anime a su marido a volver al trabajo antes de los 4 meses, que bastante tiene con el nuevo vástago como para tener a alguien más dando guerra.

Lamentablemente es la mujer la que debe renunciar a su carrera profesional para atender a la familia. También es cierto que en muchos casos la decisión es de la propia mujer, por un insitito maternal. Sin emabrgo, las pocas que no renuncian, deben cargar también con la gestión familiar y  trabajar a dos turnos, el turno en la empresa, más el turno en casa. El primero remunerado, y el segundo, muchas veces, ni siquiera reconocido y menos agradecido.

Pincha dos veces sobre el vídeo para verlo a panatalla completa.

ESCRIBE UN COMENTARIO: