Decía Groucho Marx; “Paren el mundo que me bajo“. Y no le faltaba razón. Que el vestido que esta señora se vaya a poner para dar las campanadas sea noticia es una muestra de la seriedad de un país. A pesar de que cada país tiene lo suyo, somos poco serios. A veces me cuestiono lo que pensarán los nórdicos, alemanes, franceses, … de nosotros por este tipo de cosas. (Más si luego nos tienen que dar ayudas…)
Tenemos el desempleo juvenil más alto de la ODCE, un 27,4%, una deuda de 1.577.266 millones de euros (entorno al 110% del PIB), una tasa de desempleo del 12%, España está fuera del top de países que lidera la carrera por la innovación en la UE … pero lo importante, es el vestido de la Pedroche. Pan y circo.
“Más se perdió en Cuba, y volvieron cantando”
Totalmente de acuerdo, sospecho que es intrínseco a nuestra cultura católico romana. Creo que hay una falta de ambición como sociedad y siempre con el convencimiento de “Dios proveerá”.
Posiblemente cada vez hay más personas ignorantes, por conveniencia, aunque una mayoría de personas sí reconocemos lo que somos como país.
Preferimos “volver cantando” que enfrentarnos a la cruda y triste realidad, que vamos a dejar como herencia a nuestros hijos.
Preferimos criticar el vestido de la Pedroche que afrontar nuestro presente.
Seguiremos pidiendo ayudas, hasta que no queden, y después…… “Dios proveerá” o “volveremos a casa del padre como hijo pródigo”
Por siempre y hasta el fin, Pan y circo.