Cuando me lo hacen a mí es injusto y es algo personal, cuando lo hago yo, está justificado, o ha sido un accidente. Todos deberíamos tener un mayor grado de empatía. Saber ponernos en el lugar del otro para procurar entender su punto de vista. Dirigir no es fácil. Es prácticamente imposible contentar a todo el mundo. Tenemos que hacer lo que hay que hacer, y en ocasiones, determinadas personas no lo entenderán. Debemos pues invertir tiempo en explicar las decisiones, y pedir un poco de empatía a la otra parte. Desde la barrera, los toros se ven muy bien, pero es diferente estar en el ruedo.
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