Cada tres o cuatro meses nos juntamos un grupo de amigos que estudiamos juntos y que ocupamos puestos de responsabilidad en diferentes empresas. Nos reunimos en la empresa de uno, y ese ha tenido que preparar una presentación sobre alguna experiencia que haya tenido y quiere compartir con el grupo. En la primera vuelta, visitamos también las plantas. Aprovechamos también para comentar con qué consultores estás trabajando, en qué estas centrado, etc.
Quedamos a las once de la mañana, terminamos a las dos de la tarde, cuando vamos a comer un menú, donde además de la comida, seguimos compartiendo experiencias.
Me resulta sumamente interesante, ya que aprendemos unos de la experiencia de otros.
1. Estar abierto. Es decir, tener una mente que te permita compartir. Esto no es tan sencillo. La mayoría de las empresas no quieren enseñar lo que hacen, por miedo a que les copien (en la mayoría de los casos me preguntaría; ¿copiar qué?). Si no estas dispuesto a enseñar, dificilmente aprenderás de otros.
2. Tener algo que contar. Haber pasado por experiencias diferentes o hacer del trabajo algo diferente.
ESCRIBE UN COMENTARIO: