Así sería nuestra vida si no tuviéramos problemas. Lo bonito del trabajo, es que ocurran cosas, llámense problemas, ya que son oportunidades para mejorar enfrentándonos a nuevos retos (siempre, en su justa medida). Y aquí, como en todo, es importante el enfoque. Acercarnos a los problemas como oportunidades y no como “marrones” a solventar.
Quizás alguno pensará que no ando muy cuerdo, pero tal vez si reflexionas en cómo sería tu día a día si fueran exactamente igual todos los días, sin ningún contratiempo, me des la razón. Véase “Atrapado en el tiempo (El día de la marmota)” con Bill Murray.
El aprendizaje no está en la facilidad, se da en la dificultad. No pasa por la monotonía, está en la complejidad. En que cada día sea diferente, y si no lo es, haz que lo sea. El trabajo monótono aburre. El trabajo variable hace que el día se te pase volando.
Evita el bostezo…
COMENTARIOS (1)
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Cómo siempre totalmente de acuerdo Jon,si todo los días fueran iguales, sin alegrías y problemas, sería horrible, eso sí, la película no es ‘El día de la marmota ‘ si no ‘ Atrapado en el tiempo’ aunque todos, yo incluido, la conocemos y nombramos como pones en tu articulo.Un abrazo