En esta vida las casualidades son las justas. Atraes lo que verdaderamente llamas. Si eres mala persona, no te rodearás de gente maravillosa. Dios los crea y ellos se juntan.

El antes. Cierta planificación en tu trabajo y en tu vida no viene mal. Marcar un horizonte y establecer una serie de metas que provengan de tus sueños y aspiraciones.

Todo el mundo debería tener sueños. Muchos. Los sueños son los que marcan nuestros objetivos. Los que te ayudan a levantarte y a no desistir cada vez que te caes.

Decía Emilio Duró “el amor se va, pero ella se queda” (es igualmente válido con el género opuesto, género fluído, bigénero, transgénero, pangénero, queer,… vamos, que todos

“Memento mori” viene del latín clásico, y según parece, se utilizaba en la Antigua Roma cuando un general volvía de la guerra tras haber vencido y entraba en Roma, un esclavo le repet

Lamentablemente hoy en día hay dos formas de conseguir las cosas; trabajando mucho o teniendo suerte y tocándote la lotería. Lo primero es más probable que lo segundo.

En tu vida has tomado, tomas y tomarás millones de decisiones. Constantemente.

Prácticamente todo en la vida se consigue con esfuerzo, perseverancia y constancia.

Todo lo que tienes, todo lo que has conseguido ha sido por acumulación. Ese poquito a poco que con el tiempo se ha convertido en mucho. Es el secreto del hábito y de la mejora continua.

Tienes dos opciones:
1. Quedarte sentado en tu silla de ruedas maldiciendo al mundo y con una campanilla que haces sonar cada vez que quieres algo.
2. Enfrentarte a la vida.

Ni los jefes deben actuar como padres ni los empleados como hijos. Esto es una empresa. Si te quieren poco fuera, no vengas a buscar amor dentro.

Dios los crea y ellos se juntan. La gente amargada atrae gente amargada, sencillamente, porque el resto se escapa. La gente alegre, atrae gente alegre.