Ya nos avisó Charles Darwin allá por 1859 cuando postuló su teoría de la “Evolución de las especies” y el concepto de “selección natural”, pero la verdad, es que no le hemos hecho mucho caso.
“Las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes; sino las que se adaptan mejor al cambio”.
Y la realidad hoy es esa. Es necesario tener una organización flexible que sea capaz de adaptarse a los cambios del mercado rápidamente. De otra forma, para cuando te quieras dar cuenta, estas fuera, y es tarde.
En los últimos años hemos visto como empresas pequeñas de reciente creación pueden poner en jaque a empresas enormes que llevan años operando en un sector. La única posibilidad que tienen estas últimas es la de comprar a las pequeñas a base de talonario. Pero el problema no se resuelve, porque surgirá una tras otra. El problema de raíz es otro, se trata de tener cintura, de ser rápido y de cambiar el modelo para que tu organización siga la teoría de Darwin…
Jon, quizás sea este articulo el que más me ha complacido y del que tanto podemos aprender, Yo te felicito.
Gracias Antonio. Un abrazo y cuídate mucho.