Acabo de hacer 53 años y llevo formándome desde que tenia 3. Nunca he sido grande. Nunca me he movido para ser grande. Pero he conseguido todas las metas que me he propuesto, siempre.

Repito muchas veces que si alguien no está a gusto en nuestra organización, que se vaya. La puerta de salida es muy grande, y no hay que hacer gran esfuerzo para abrirla.

Tu eres el cocinero y tu cliente quien paga la cena. Como a todo cliente, le gusta ser bien atendido y tener la posibilidad de elegir entre diferentes opciones para cenar.

No hay una asignatura que enseñe a dirigir personas.

Necesario e imprescindible estar atentos a las señales del mercado y anticiparse a ellas. Todo habla. Desde tus clientes, proveedores, competencia,….

Si en una organización no se hace nada con las personas que rinden poco, es cuestión de tiempo que los que rinden dejen de hacerlo. El contagio será evidente.

Las empresas debemos estar en constante búsqueda. Y esto nos lleva al cuestionamiento.

No se puede ser bueno en algo que no se practica. Y añadiría que además no basta con practicar un poquito, hay que practicar mucho.

Una persona se hace grande cuando hace crecer a otros, porque se desarrolla a si misma, a la vez que se llena por dentro.

Juzgamos rápido y por eso, muchas veces nos equivocamos.

Todo lo que no se cuida se deteriora con el paso del tiempo. Casi todo en esta vida necesita mantenimiento; coches, máquinas, casas,… las personas también.

Cada cuál responderá a esta pregunta según su situación, pero hay unos aspectos comunes que deberían cumplirse para continuar en un proyecto:

Desarrollo: tener la posibilidad de crecer en mi