En ocasiones hemos tenido que despedir a buena gente que no hacía bien su trabajo. Simplemente, no estaba a la altura de lo que nuestra organización necesitaba. Es una pena y duele. Sin embargo, también nos ha ocurrido lo contrario; hemos despedido gente que podía trabajar más o menos bien, pero que eran un cáncer para la organización por su forma de ser y actuar. Estos últimos son los despidos que menos cuesta hacer. Hemos pagado mucho dinero por sacar de la organización a este tipo de gente, porque llevaban mucho tiempo en nómina, pero:
Como dice el título del libro de Robert Kriegel y David Brandt: “De las vacas sagradas se hacen las mejores hamburguesas“.
Tanta paz te lleves como descanso dejas…
Me encanta el video pero lo que más la frase “ De las vacas sagradas se hacen las mejores hamburguesas”
Cuanto dinero se pierde en las empresas por no tomar ciertas decisiones!!!
Totalmente de acuerdo con tu reflexión