Leía el otro día la frase; “el tango es cosa de dos”, obvio, solo queda muy raro. En la empresa no debieran existir bandos. Ni los de arriba y los de abajo, ni los de oficinas y los de producción, ni la dirección y los sindicatos, ni los de comercial y los de compras,… Porque si no bailamos juntos, no hay baile. Y esto es algo que debemos entender todos. Necesitamos del otro para que la cosa funcione. Y está claro que determinados bailes los puedo y los tengo que hacer solo, pero muchos de los bailes que hay que danzar son en pareja, y no nos queda más remedio que romper esas barreras mentales que nos impiden sacar al otro a la pista de baile.
Si hablamos de tango, eso son palabras mayores. A todo lo dicho añado sentimiento, atreverse, vivirlo… es como la vida misma y en la empresa me parece un gran símil.